miércoles, 26 de septiembre de 2018

Palabras

Palabras

A partir del siglo XX la pintura también es escritura.

René Magritte-The Treachery of Images (Ceci n'est pas une pipe)-1929

Posiblemente esta sea la primera obra pictórica en la que un texto es un elemento esencial de la misma.

Anteriormente las palabras solo estaban presentes en el título de la obra (y en la propia obra si formaban parte de la realidad representada en ella) pero a partir de entonces entraron a formar parte de los componentes del lenguaje pictórico.

En el caso de Magritte la finalidad del texto incluido en el cuadro tal vez fuera simplemente llamar la atención, como buen surrealista que era, porque obviamente nadie pudo discutirle su veracidad (es rigurosamente cierto que lo que hay en el cuadro no es una pipa sino la representación de una pipa).

Pero con el tiempo los textos han ido estando más y más presentes en la pintura,   especialmente en tres de sus corrientes: informalismo, pop y arte conceptual.


Antoni Tàpies- L’esperit català-1971

En esta obra informalista, pueden apreciarse junto a las cuatro barras y el fondo amarillo de la bandera catalana una multitud de signos de significado abierto, pero también palabras con un claro significado político en la época como llibertat, Visca Catalunya, veritat, democracia, Catalunya viu, cultura, espiritualitat.

Ese tipo de pintura fue adoptada por el graffiti para inundar las calles de las ciudades con proclamas de todo tipo envueltas en un formato artístico.

Robert Indiana-LOVE-1967

Ed Ruscha- I Don't Want No Retro Spective-1979

Ed Ruscha-OK (State I)-1990

El pop dio carta de naturaleza a la utilización de palabras en sus obras (sobre todo de palabras comunes) para, de alguna manera, dar a la pintura la inteligibilidad que había perdido con la abstracción manteniendo la vocación plástica de, singularmente, el expresionismo abstracto.

Robert Indiana utiliza las letras constitutivas de la palabra LOVE como materia del cuadro de la misma manera que lo haría con los componentes de una escena urbana (colores planos, esquematización de lo representado, etc). La ventaja de las palabras es que las posibilidades de combinación de los colores utilizados para los cuerpos de las letras y para los espacios situados entre ellas es enorme y, de hecho, Indiana hizo muchas versiones del cuadro.

Por su parte, Ruscha hace uso de las palabras por dos motivos: al ser adimensionales le permiten representarlas con el tamaño que le plazca; al poder tener varios significados le facilitan dotar de ambigüedad a la obra. La abreviatura OK puede significar tanto estoy de acuerdo como Oklahoma, el estado natal de Ruscha y I DONT WANT NO RETROSPECTIVE (nótese la doble negación) llegó a ser utilizada como portada del catálogo de una exposición retrospectiva del pintor.

Las tres obras que se mostrarán seguidamente están expuestas actualmente en Madrid en las galerías que se mencionan y pueden servir de ejemplos del arte conceptual actual.

José Dávila-Galería Travesía Cuatro-2018

¿Por qué se superpone en esta obra una columna de formas circulares y semicirculares a un fragmento de un texto científico?

En los dos dos primeros párrafos del texto que proporcionan en la Galería se encuentra la respuesta:

La obra de Jose Dávila se origina a partir de los lenguajes simbólicos que operan dentro de la historia del arte y la cultura visual occidental. Estos lenguajes pictóricos, gráficos y escultóricos son reconfigurados en relaciones contradictorias y contrastantes, poniendo al límite la correspondencia entre forma y contenido.

El artista representa estas oposiciones a partir de diversas perspectivas: la asociación entre la imagen y la palabra; las disposiciones estructurales de ciertos materiales que pueden llevar al equilibrio armonioso o al desorden; el uso de rutas periféricas para definir el espacio arquitectónico y la presencia de los objetos.

Tito Pérez Mora-Twin Gallery-2018

¿Se puede representar artísticamente la pérdida de la memoria?

 Sí, basta bordar la expresión I REMEMBER sobre fieltro natural, hacer a continuación lo mismo bajo de la anterior, sin completar su parte inferior y dejando sueltos sus hilos, y así sucesivamente hasta que la expresión resulta ininteligible porque la memoria se ha escapado por la multitud de hilos colgantes.

Pipo Hernández Rivero-Galería Nieves Hernández-2018

Lounge (el nombre de la exposición) juega a resignificar los roles de la obra de arte y, en especial, la pintura en el ámbito del confort doméstico. Así resume la galería su propósito.

¡Que mejor mensaje que “Tienes razón” puedes encontrar en una obra de arte colgada en tu casa!








miércoles, 12 de septiembre de 2018

Objetos encontrados


           Una de las vías que encontraron los artistas de vanguardia de comienzos del siglo XX para enfrentarse al orden establecido fue la de atribuir significado artístico a objetos corrientes. corrientes.

Marcel Duchamp-Fuente-1917

Como es bien conocido, esta obra tiene el honor de ser la primera en la que un objeto de la vida cotidiana (un urinario fabricado industrialmente) pasa a ser una obra de arte porque se presenta como tal, firmada por un artista (en este caso R. Mutt, un pseudónimo de Duchamp), en una exposición pública.

A ese tipo de objetos se les suele llamar objetos encontrados (ready made en inglés, object trouvé en francés).

Dejando a un lado el componente de escándalo que sin duda motivó a Duchamp para crear esa obra atribuyendo a un urinario el nombre (y se supone que la función) de una fuente, lo cierto es que inauguró una etapa en la que la resignificación de objetos encontrados pasa a formar parte de la labor del artista.

En la exposición Dadá ruso 1914-1924 que puede verse actualmente en el Museo Reina Sofia se ilustra perfectamente el ambiente dadaísta de la época en el que, como se dice en su catálogo: “La creatividad transracional —fuera de la lógica y de lo consciente—, empapada de risa y de parodia perversa, fue el mecanismo operativo utilizado entonces para escandalizar al público, menospreciar los valores artísticos y sociales tradicionales y mofarse de la destreza técnica”.

 Y en muy poco tiempo los objetos encontrados pasaron a formar parte de los materiales de trabajo de artistas consagrados.

Picasso-Cabeza de toro-1942

Picasso-Gran Pájaro-1942

Picasso fue uno de los grandes artistas que utilizó objetos encontrados logrando, como puede observarse en las dos obras anteriores, que un sillín de bicicleta forme parte de la cabeza de un toro y una horca de la cabeza de un gran pájaro.

Joan Miró-Jeune fille s´évadant-1967

Joan Miró-L´Oeil attire les diamants-1974

Joan Miró- Souvenir de la Tour Eiffel-1977

Las tres obras anteriores pudieron ser vistas, entre otras muchas, en la reciente exposición JOAN MIRÓ: ESCULTURAS 1928-1982 del Centro Botín. Se trata de obras más complejas que las de Picasso tanto por la integración de objetos encontrados de diversos tipos como porque algunos de ellos son objeto de algún tratamiento por parte del artista.

Existen incluso objetos encontrados que tienen un potencial artístico en sí mismos como ha demostrado Antonio Pérez.

Estos tres objetos encontrados (por Antonio Pérez) junto con otros muchos están expuestos en casi todas las salas del Museo Fundación Antonio Pérez de Cuenca en un continuo diálogo con el resto de las obras de la colección permanente.

A efectos artísticos un objeto encontrado también puede ser, por ejemplo, el Parlamento de Berlín.

Christo and Jeanne-Claude-Wrapped Reichstag-Berlin-1971-95

 Mediante este tipo de proyectos efímeros se consigue multiplicar el atractivo simbólico del objeto envuelto.

Este es un objeto encontrado muy necesitado de resignificación pero lamentablemente parece que entre los profesionales que se barajan para ello no se está considerando a los artistas plásticos a pesar de ser, como hemos visto, los más dotados para la tarea.